La medicina es una ciencia en continua evolución: ejemplo de ello es la ventilación no invasiva.
Hace más de 25 años, en pacientes con insuficiencia respiratoria grave, el único abordaje que restaba para dar soporte a éstos enfermos, si los dispositivos habituales de oxigenación no eran suficientes, era la IOT.
Surge entonces una técnica alternativa, con muchas menos complicaciones y comorbilidades para el paciente respiratorio grave : la ventilación no invasiva.
Hoy, esta técnica ha ido progresando , no sólo en cuanto a respiradores y software, sino en cuanto a las primeras indicaciones hace más de 25 años.
Conocer los criterios de inclusión , los distintos niveles de evidencia para cada uno de ellos, dominar el uso de los ventiladores, y la “no demora” en la aplicación de la VNI es algo indispensable para el médico de urgencias.
Y acorde a ello, forma parte de la actuación cotidiana de los profesionales de la urgencia de los hospitales gallegos.
